Sinergias para promover temas de nuestros pueblos indígenas

Actividad cultural para visibilizar la importancia de nuestros orígenes y cultura
El pasado 12 de septiembre, en el aula Magna B del Campus Soyapango de la Universidad Don Bosco, se llevó a cabo el conversatorio “Una mirada a la huella de nuestros pueblos indígenas” en trabajo colaborativo entre el Departamento de Arte y Cultura (DAC) y la Biblioteca Rafael Meza Ayau.
El evento contó con la participación de Lidia Juliana Ama de Chile, reconocida lideresa indígena Náhuat del pueblo de Izalco, Mariella Hernández Moncada, antropóloga y autora de trabajos académicos relacionados a los pueblos indígenas de El Salvador y la moderación de Yecenia Álvarez, Responsable de Referencia y Formación de Usuarios de nuestra Biblioteca.
En deferencia al tema a tratar y en consonancia con la práctica de nuestros pueblos indígenas, se inició la actividad con una invocación ancestral dirigida por Juliana Ama; esto fue un momento novedoso para los asistentes quienes presenciaron y vivieron ese momento de forma reflexiva.
Previo al conversatorio la Lcda. Norma Cortez, directora del DAC, brindó las palabras alusivas al evento y socializó información del proyecto Portal Educativo para la Diversidad Cultural Sostenible en América Latina (EPSULA por sus siglas en inglés), auspiciado por la Unión Europea y del cual la Universidad Don Bosco es parte.
Con el objetivo de poner en contexto el tema, en la primera intervención la Antropóloga Mariella Moncada, explicó sobre los tres grupos de pueblos indígenas identificados en El Salvador, siendo estos los Náhuat Pipiles, los Lencas y Cacaopera.
Los temas abordados fueron: El papel de la mujer en la conservación de la cultura, enfatizando el rol activo de la mujer indígena, se explicaba que las mujeres han sido las que han difundido el idioma Náhuat en el occidente del país.
Hubo reflexiones entorno al artículo 63 de la Constitución Política de El Salvador, en el que el Estado desde el 2014 reconoció la existencia de los pueblos indígenas, sin embargo, desde la vivencia, cada una de las panelistas exponían que se deben potenciar más iniciativas y que aún falta mucho por hacer; reconocían que estos espacios de diálogo son importantes para sensibilizar sobre la importancia de la difusión de la cultura desde nuestros antepasados y no olvidar de dónde venimos.
Se realizaron reflexiones sobre la importancia de que el sistema educativo promueva el Náhuatl y la historia de nuestros antepasados siendo ellos parte de lo que se incluye en los textos de los libros de educación básica; se comentó sobre algunas iniciativas existentes pero que es necesario que éstas sean sostenibles. Se finalizó recomendando que cada individuo debe apropiarse de sus raíces y cada uno puede hacer difusión de la cultura y tomar acciones desde la cotidianidad para preservarla.